El mercado de valores de la India, medido por el MSCI India en dólares ha superado al índice MSCI Emerging Markets por 2,3% anual en estos últimos 10 años (desde julio de 2006 a julio de 2016).
El dinamismo demográfico, el crecimiento sostenido, la aparición de un fuerte espíritu empresarial y de innovación hacen del mercado indio una inversión particularmente atractiva respecto a las demás economías emergentes. Más de un 65% de la población tiene menos de 35 años y amplios segmentos de la sociedad poseen una buena educación y hablan inglés.
El sentimiento de los inversores hacia la India sigue siendo positivo. El primer ministro Narendra Modi ha hecho progresos en su programa de reformas estructurales, como, por ejemplo, el aumento del límite de propiedad extranjera en sectores como el del seguro y la propuesta de una nueva organización fiscal centralizada, lo que simplificará enormemente la actual estructura fragmentada en un gran número de departamentos.