Hacía mucho tiempo que no veíamos a los mercados tintados de rojo como la semana pasada. De las grandes bolsas tan sólo la japonesa escapó a las pérdidas. El índice Morningstar Japan se anotó un 0,3% en yenes y un 0,8% en euros (la divisa nipona, por lo tanto, se depreció ligeramente frente a la moneda europea). El mercado japonés es sin duda la gran sorpresa de este año. De las tres grandes áreas (Europa, Estados Unidos y Japón) es el mercado que más ha subido en moneda local en lo que llevamos de año, ganando (en yenes) un 19% frente a un 17% (en dólares estadounidenses) para el mercado americano y un 14% (en euros) para el mercado europeo.
Las mayores caídas semanales fueron para los países de la Eurozona, sin grandes diferencias entre ellos: España cayó un 2,3%, al igual que Francia, Alemania perdió algo más (un 2,5%) mientras que Italia se anotó un descenso del 2,1%.
Algo más suaves fueron las caídas al otro lado del Atlántico: el índice Morningstar US Market retrocedió un tímido 0,2% en dólares, pero la fortaleza del euro hizo que terminara la semana con una caída del 0,6%.
La suerte estuvo más repartida en los mercados emergentes, con fuertes diferencias entre países. El gran ganador de la semana fue el mercado ruso que registró una subida del 4,8% en euros (5,1% en rublos), aunque en lo que llevamos de 2017 su rentabilidad es bastante pobre (-4% en euros y +3% en rublos). El peor parado de los grandes mercados emergentes fue India que se dejó un 2,6% en euros a lo largo de la semana.
Las caídas también hicieron acto de presencia en los distintos segmentos de la renta fija de la Zona Euro, con pérdidas del 0,7% para el high yield, del 0,4% para la deuda pública y del 0,3% para la deuda corporativa.
A nivel sectorial, también predominaron las caídas sobre todo en los sectores de ecología (-2,3% en euros), agricultura (-1,7% en euros) y finanzas (-1,6% en euros). Pero hubo secyores que consiguieron anotarse ligeras ganancias, caso del sector energético (+0,9% en euros) y del sector consumo no cíclico (+0,7%). En lo que llevamos de año el sector tecnología, con una ganancia del 25% en euros, es claramente el que más destaca en el lado positivo, mientras que el de telecomunicaciones (-10% en euros) se afianza como el sector menos rentable del año.
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